Aprovecho para hablaros de esta planta ya que ahora es el momento de empezar a plantar dalias. Es una planta de mantenimiento muy sencillo pero tremendamente agradecida.
Al igual que el concepto de “planta adecuada para el lugar adecuado” (y de esta manera la planta es feliz donde está y sufrirá muchas menos plagas y enfermedades) existe el concepto de lo que los anglosajones llaman “Companion planting” o siembra asociada, y que consiste en la interdependencia saludable entre las distintas especies.
Todos sabemos que un paseo por un jardín, un parque, una senda de montaña o cualquier lugar verde nos resulta agradable y nos relaja. Varios sentidos resultan estimulados debido a la exposición a la naturaleza, ya vivamos en pleno centro ciudad o en el campo.
La jardinería de primeras puede resultar complicada; las plantas son susceptibles a muchísimas cosas: pueden recibir demasiado sol, o demasiado poco, pueden afectarles plagas o enfermedades, podemos plantarlas en el lugar inadecuado para ellas por ejemplo por su tamaño, o demasiado grande o demasiado pequeña, o encontrarse en un lugar en donde los niños juegan, o en donde hay mucho paso. Puede resultar abrumador al principio.